Una tienda de regalos. Pero no una tienda de regalos más. Solamente por ver sus tarjetas de felicitación ya merece la pena entrar. No tienen desperdicio.
Hay, por supuesto, mucho más, todo ello en general con ese regusto retro anglosajón que a mí tanto me gusta. Además, el ambiente de la tienda, ahora en navidad, digamos que es aún más "confortable"...
No hay comentarios:
Publicar un comentario